Tengo las tripas revueltas.
Discúlpenme por lo extenso del post, pero el tema no puede ser tratado con brevedad. Es muy, pero muy importante.
Desde el momento en que la AFA (Asociación del Fútbol Argentino) decidió dar por finalizado el contrato que tenía con la gente del Grupo Clarín por los derechos de la transmisión del fútbol y el anuncio de que el gobierno se ocuparía de pagar el dinero que la AFA solicitaba y transmitir el fútbol a través del Canal 7, se desató una tormenta de fuego sobre el gobierno nacional como hace muchos años que no veía.
El diario Clarín, vocero del grupo del mismo nombre, comenzó a mostrar titulares y notas en el interior del periódico atacando al gobierno con una virulencia igual -y no sé si no es hasta peor- que la que usaban este diario y otros de la Argentina en la época en que clamaban por golpes de estado total y absolutamente contrarios a la libertad de expresión.
Semejante despliegue en un primer momento, me pareció exagerado. Tenía la sensación de que era en venganza por la pérdida de un negocio millonario por los derechos exclusivos de todo el fútbol de Argentina. Acabo de enterarme que fue un negocio de $9.000.000.000,= (nueve mil millones de pesos). Más de 2.300 millones de dólares.
Aún así, con el conocimiento de la increíble suma de dinero que ganaron desde que de manera espúria obtuvieron los derechos por el fútbol, parece demasiado.
Pero hete aquí que el gobierno no sólo atenta contra la libertad del Grupo Clarín para monopolizar el negocio del fútbol, sino que además ha presentado su proyecto de Ley de Servicios de Comunicación, que basándose en las leyes de países del primer mundo, ha generado un proyecto mejorado, según opinión de Frank La Rue, relator de la ONU en materia de libertad de expresión.
No tuve mucho tiempo -y seguramente la capacidad- para analizar completamente la ley, pero viendo algunos de sus artículos, me queda absolutamente claro que la ley que reemplazaría a la que la junta militar del último gobierno de facto creó para asegurarse del control absoluto de la libertad de prensa y de que grupos afines manejen el negocio.
Cuando hoy recibí el PPS que Tere me mandó referido a este tema, terminé por decidirme a hacer este post.
En él aparecen las supuestas versiones de personajes de valía -en cuanto a su idoneidad sobre el tema no podría discutirse- que tienen que ver con la libertad de expresión.
Como soy muy excéptico a la hora de creer lo que PPSs y cadenas informan, simplemente googleé algunos datos que allí aparecían, y me encontré con que era todo cierto.
Algunas opiniones:
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