Yo puedo hablar de la Argentina por el derecho que me da el haber nacido y vivir aquí.
Ese mismo derecho lo tienen quienes han nacido aquí, y por los motivos que sean, estén viviendo en otro país.
Habría que hacerlo extensivo a quienes habiendo nacido lejos, viven por las razones que sean, en este país.
Por último, también tienen derecho a opinar quienes desde afuera – y bajo la óptica que les dan las costumbres y culturas de todos y cada uno de los países del globo – miran hacia la Argentina. Sigue leyendo