Interesante video de alguien que ha abierto los ojos y se anima a decir lo que ha visto sobre las guerras que libra Estados Unidos en países lejanos.
Me he tomado el trabajo de reproducir el texto que aparece como subtiítulado en el video:
… pero sólo pude sentir vergüenza.
El racismo ya no podía enmascarar la realidad de la ocupación por más tiempo; eran personas, eran seres humanos. Desde entonces me plaga la culpa; puede que vea a un hombre mayor, como el que no podía caminar y lo rodamos sobre una camilla para que la policía iraquí se lo llevara.
Siento culpabilidad cada vez que veo a una madre con sus hijos como la que sollozaba histéricamente gritándonos que éramos peores que Saddam mientras la obligábamos a salir de su casa.
Siento culpabilidad cada vez que veo a una niña joven como la que agarré por el brazo y arrastré hacia la calle.
Se nos dijo que luchábamos contra terroristas. El verdadero terrorista era yo, y el verdadero terrorismo era esta ocupación.
El racismo dentro de lo militar ha sido durante largo tiempo una herramienta para justificar la destrucción y ocupación de otro país.
Durante mucho tiempo se ha usado para justificar las matanzas, la subyugación y torturas de otras gentes.
El racismo es un arma vital empleada por este gobierno. Es un arma más importante que un rifle, que un tanque, que un bombardero o que un barco acorazado; es más destructiva que el proyectil de atrillería, o un bunker blaster (revienta búnkers), o un misil Tomahawk.
Mientras que esas armas son creadas y de la propiedad de este gobierno, son inofensivas mientras que haya personas que se nieguen a usarlas.
Aquellos que nos evían a la guerra, no tienen que apretar el gatillo o tirar una ronda de morteros.
No tienen que luchar en la guerra.
Sólo tienen que vender la guerra. Sigue leyendo