Hace ya bastante tiempo que quería tocar hablar de ésto.

Viendo lo que está sucediendo en estos momentos en la Franja de Gaza, y observando las imágenes y leyendo algunas de las noticas, no consigo entender cómo Israel está haciendo éso.

Hace no mucho tiempo -todavía quedan víctimas- una nación, la Alemania nazi invadía Polonia, comenzaba a perseguir a los judíos, más tarde invadió otras naciones y comenzó la matanza de judíos. La famosa «solución final».

Cualquiera imaginaría que para los judíos, la idea de volver a pasar por lo mismo les debe helar la sangre seguramente.

Cuando la Segunda Guerra Mundial terminó, los judíos rescatados de los campos de concentración y a los que habían conseguido escapar del horror, fueron «acomodados» por los vencedores en un lugar distinto el que habitaban antes de la locura nazi.

No sé cuántos habrán quedado en Europa o emigrado a América.

Fueron llevados a un territorio que ya tenía sus problemas étnicos y religiosos.

Los países aliados, con la fuerza que detenta el guerrero victorioso, les hicieron «un lugar» en esa región que llevaba mucho tiempo siendo conflictiva.

No podía suceder nada diferente a lo que sucedió entonces.

Los problemas aumentaron, había ahora un nuevo integrante en la lucha por esos territorios que desencadenó en varias oportunidades importantes conflictos armados, pero ya de nación contra nación.

Para no hacer esto muy extenso, resumiré diciendo que Israel ocupó territorio que no se le había asignado, simplemente como cuestión de dominio -tal como lo reconoció muchos años después, Moshe Dayan-.

Israel sigue ocupando territorios que no le corresponden a pesar de lo dispuesto por Naciones Unidas, está construyendo un muro para encerrar a sus vecinos/enemigos y actualmente invadiendo la Franja de Gaza, usando bombas de racimo y fósforo. Armamento prohibido por la Convención de Ginebra.

Con la excusa de querer acabar con quienes lanzan misiles sobre su territorio, han decidido exterminar a civiles inocentes con tal de conseguir un objetivo que nunca ha quedado claro.

La noticia aparecida en el New York Times, de que pidió permiso a Bush para atacar Irán como «medida preventiva», me hizo acordar a los argumentos de Hitler cuando invadió Polonia.

La construcción del muro y el aislamiento de los palestinos y ahora la matanza, me trajo a la mente el libro Mila 18 de León Uris.

Pienso y hago la comparación.

Los nazis habían encerrado en un gheto a los judíos, que terminaron rebelándose contra quienes los estaban matando de a poco.

Todavía recuerdo la sensación que me provocó el libro. Indefensos contra poderosos. Héroes contra asesinos.

En los noticieros podemos ver hoy la misma situación, pero las víctimas de ayer repiten lo que hicieron sus victimarios.

Me niego a pensar que la mayoría de los israelíes están de acuerdo con la política beligerante de sus autoridades. No creo que piensen que porque la tortura esté aceptada en su constitución la convierte en benigna. No me imagino a la mayoría del pueblo buscando la manera de provocar más violencia en esos territorios como para estar seguros de que siempre podrán vivir en un estado de guerra permanente.

¿Quiénes y de qué manera llegaron al poder y generaron todos estos conflictos año tras año?

¿Qué fines persiguen los que buscan la guerra? ¿quién gana con esta situación?

No estoy de acuerdo con los misiles que arrojan sobre territorio israelí, así como seguramente Oskar Schindler estaría en contra de que los que estuvieran en los guetos arrojaran cosas fuera de los muros. Pero no puedo justificar la desmedida reacción a estos ataques.

Ya he perdido las esperanzas de ver algún día la paz -aunque sea sujeta por alfileres- en Medio Oriente.

El negocio de la guerra es demasiado poderoso como para desaparecer de allí.