Por si alguien no sabe quién fue Tomás de Torquemada, pueden ver lo que cuentan de él. Juan Antonio Llorente, primer historiador del Santo Oficio, asegura que durante su mandato fueron quemadas más de diez mil personas y otras veintisiete mil sufrieron penas infamantes.
Acabo de leer la noticia de que Joseph Alois Ratzinger, más conocido como Benedicto XVI, ha decretado la vuelta de la misa en latín.
Recuerdo que cuando era chico e iba a misa, lo que menos hacía era comunión con Dios. Recuerdo que no me quedaba muy claro qué hacía alguien de espaldas, que hablaba en un idioma que me era imposible de entender y que estaba asistido por uno o dos chicos vestidos con vestidos largos y que tocaban una campanita que sonaba muy lindo. Es más, tenía la esperanza de que un día me la prestaran. Iban a ver lo que era tocar con ganas.
Un día, el tipo que estaba de espaldas, comenzó a hacer lo mismo que antes, pero ahora de frente y hablando en español. Fue todo un progreso. Ahora empezaba a entender.
¡¿Otra vez misa en latín?!
El papa justificó su decisión y dijo que debe ser tomada como un gesto de «reconciliación» dirigido a los fieles que «siguen muy apegados» a la liturgia de su infancia. Y denunció las «deformaciones de la Liturgia al límite de lo soportable».
¿Qué sujeto más falaz!
¿Acaso la misa se oficiaba en latín en los tiempos de Jesucristo?
¿Los rituales, los impuso Pedro?
¿Cuándo fue que comenzó a usarse el latín para oficiar misa?
CHA CHÁN, CHA CHÁÁÁNNN
A partir del Concilio de Trento.
¿Y cuándo fue el concilio?
OTRO CHA CHÁN, CHA CHÁÁÁNNN
En el Siglo XVI.
¿…?
REQUETE CHA CHÁN, CHA CHÁÁÁÁÁNNN!!!
Todavía imperaba la Santa Inquisición.
¿De dónde sacó Benedicto XVI que acercará a las personas a la iglesia si no puede entender qué es lo que le dicen?
¿Quién es realmente Ratzinger? ¿Será éste?